Mala circulación en la osteocondrosis cervical: tratamiento, síntomas, causas de la enfermedad.

síntomas de osteocondrosis cervical

La osteocondrosis es una patología degenerativa-distrófica crónica del sistema esquelético, causada por trastornos metabólicos bajo la influencia de factores provocadores y caracterizada por una serie de síntomas en muchos órganos y sistemas. Con la osteocondrosis, el cartílago de las vértebras se destruye y sus cuerpos y apófisis se deforman.

Osteocondrosis cervical: síntomas y tratamiento.

Es raro que hoy en día alguien no encuentre manifestaciones de esta enfermedad tan extendida: según las estadísticas, alrededor del 60% de la población en los países desarrollados sufre manifestaciones de osteocondrosis en diversos grados. Las principales razones de esta prevalencia tan extendida son el trabajo sedentario y la falta de movimiento de la gente moderna.
Anteriormente, la osteocondrosis cervical en los hombres generalmente se manifestaba entre los 45 y 50 años, en las mujeres, un poco más tarde, entre los 50 y 55 años. Pero ahora hay un rápido rejuvenecimiento: el cuadro típico son los signos perceptibles de la enfermedad a los 30 años, y no es raro que los primeros síntomas aparezcan a los 20 años.

Síntomas

Con una lesión prolongada de la arteria vertebral, se altera el suministro de sangre al cerebro. Debido a la hipoxia (falta de oxígeno), aumenta el riesgo de isquemia (disminución local del suministro de sangre), encefalopatía discirculatoria (daño vascular al cerebro) y accidente cerebrovascular.

El mareo es uno de los síntomas del accidente cerebrovascular con osteocondrosis cervical.

El accidente cerebrovascular con osteocondrosis cervical tiene los siguientes síntomas:

  • Alteraciones visuales, trastornos oculomotores. En los pacientes, la agudeza visual disminuye, aparece "niebla" ante los ojos y se produce diplopía (visión doble). Estos signos aparecen en las etapas iniciales de la patología.
  • Violación del aparato vestibular. Luego se altera la coordinación de los movimientos, el paciente se tambalea al caminar y el tono de los músculos de las extremidades superiores disminuye. Otros síntomas de alteración de la circulación cerebral incluyen vértigo (mareos), trastornos de la audición (ruido, zumbidos, debilitamiento), alteraciones en la percepción de los objetos, etc.
  • Cambiar los patrones de sueño y vigilia. Debido a la alteración de la circulación sanguínea en el cerebro, el paciente siente debilidad, aumento de la fatiga, tiene sueño durante el día y no puede dormir durante mucho tiempo por la noche.
  • Se produce un síndrome vegetativo-vascular. Aparece repentinamente debilidad, los latidos del corazón cambian (aumentan o disminuyen), se observan aumentos repentinos de la presión arterial y aumento de la presión intraocular.
  • Trastornos paroxísticos. Las personas con osteocondrosis cervical pueden desmayarse después de girar o echar la cabeza hacia atrás de repente. Esto ocurre debido a una compresión severa de la arteria vertebral y una desaceleración repentina del flujo sanguíneo.
  • Desordenes mentales. El paciente se vuelve sospechoso, demasiado irritable y se ofende sin motivo aparente. Su memoria y atención se están deteriorando.

Además de los síntomas descritos anteriormente, la osteocondrosis cervical se acompaña de cefalea (dolor de cabeza) intensa. Como regla general, las sensaciones dolorosas comienzan en la parte posterior de la cabeza, pero pueden extenderse a los brazos. En algunos pacientes aparece un dolor punzante en las sienes, que puede ir acompañado de erupción de vómito. La reacción de dolor se intensifica al girar o inclinar la cabeza.

Con la compresión prolongada de la arteria vertebral, los síntomas se intensifican y la patología progresa. En ausencia de una terapia competente, aumenta el riesgo de discapacidad. Para evitar complicaciones peligrosas, es necesario un tratamiento complejo a largo plazo.

Etapas de desarrollo de la osteocondrosis.

En el desarrollo de la osteocondrosis cervical, se acostumbra distinguir 4 etapas. Pero esta es una división bastante arbitraria, ya que la mayoría de los síntomas de la enfermedad pueden manifestarse en otras patologías. Además, el grado real de degradación de los tejidos de la columna cervical puede no corresponderse con los síntomas manifestados externamente.

Primera etapa (preclínica)

En la etapa inicial, los síntomas son leves y a menudo se atribuyen al estrés u otras enfermedades. Siente una rigidez desagradable en el cuello, dolor al realizar movimientos bruscos o al agacharse. En esta etapa, es muy posible deshacerse de la osteocondrosis incipiente con la ayuda de ejercicios terapéuticos o simplemente moverse más y ajustar la dieta.

Segunda etapa

El dolor se intensifica, se vuelve constante y se vuelve intenso con curvas o giros bruscos. Aparecen fuertes dolores de cabeza, el paciente comienza a cansarse rápidamente, se distrae y periódicamente se adormecen zonas de la cara.

Tercera etapa

La formación de una hernia de disco a menudo causa mareos, debilidad de los brazos, el dolor se irradia a la parte posterior de la cabeza y los brazos y se siente constantemente en los hombros.

Cuarta etapa

Finalmente, los discos intervertebrales son destruidos y reemplazados por tejido conectivo. Los nervios quedan comprimidos, lo que provoca dificultades de movimiento, dolor agudo, aumento de los mareos y tinnitus.

Causas de accidente cerebrovascular en la osteocondrosis cervical.

Para comprender por qué la circulación sanguínea al cerebro se ve afectada durante la osteocondrosis, es necesario estudiar la anatomía de la columna cervical. Las apófisis transversales del segmento cervical tienen aberturas que forman un canal, por el que pasan venas, nervios y arterias vertebrales. Estos últimos surgen de las arterias subclavias, pasan a través del agujero transversal de C6 (sexta vértebra cervical) y ascienden más. A nivel del rombencéfalo, las arterias vertebrales izquierdas de izquierda y derecha se unen formando una arteria de la que parten las arterias cerebral posterior, auditiva interna y cerebelosa (anterior y posterior).

Según lo descrito anteriormente, a través de la columna cervical pasan las arterias, que son necesarias para el suministro normal de sangre al cerebro. Además, en el canal espinal se encuentran venas y nervios simpáticos.

Los agujeros transversales se consideran estrechos, pero hay suficiente espacio para el haz neurovascular. Los vasos sanguíneos y los nervios no se pellizcarán ni siquiera al mover la cabeza (girar, doblar).

Las vértebras cervicales están conectadas por discos intervertebrales elásticos. Se trata de una especie de almohadillas de cartílago que suavizan los golpes al correr y saltar. Estas estructuras también protegen los nervios y los vasos sanguíneos del daño.

Con la osteocondrosis cervical, los discos pierden mucho líquido y se vuelven frágiles. El aumento de carga provoca el aplanamiento de las almohadillas de cartílago y la aparición de grietas en su capa exterior. Como resultado, aparecen protuberancias (protuberancias, hernias de disco), osteofitos (crecimientos óseos), que dañan los nervios y los vasos sanguíneos.

Referencia. Según las estadísticas médicas, alrededor del 30% de los casos de insuficiencia circulatoria en los vasos del cerebro están asociados con daño a la arteria vertebral. En la mayoría de los casos, el trastorno se produce en el contexto de osteocondrosis cervical y ateromatosis (crecimiento excesivo de tejido conectivo en la pared del vaso).

La circulación cerebral en la osteocondrosis cervical se produce por las siguientes razones:

  • El nervio que irriga la arteria vertebral está comprimido. Provoca un espasmo de la arteria, luego se interrumpe el flujo de sangre al cerebro.
  • Compresión prolongada de la arteria vertebral. Debido a la compresión constante, la luz del vaso se estrecha o se bloquea por completo (oclusión). Entonces aumenta el riesgo de síndrome de la arteria vertebral.
  • Compresión brusca de la arteria vertebral, que impide la salida de sangre. Esto puede ocurrir al girar la cabeza, luego la persona experimenta un fuerte dolor de cabeza y puede perder el conocimiento.

La compresión y el estiramiento de las arterias vertebrales pueden ocurrir incluso en personas sanas. Con la osteocondrosis cervical, un vaso importante se daña regularmente y luego surgen complicaciones peligrosas.

Causas y factores de riesgo.

Curiosamente, la posibilidad de desarrollar osteocondrosis en humanos se debe a una de sus ventajas evolutivas: la postura erguida: las vértebras se presionan entre sí y, con la edad, el tejido conectivo se degrada. Como resultado, en las personas mayores este es un proceso casi inevitable. Pero hay muchos factores que contribuyen al desarrollo más temprano y más intenso de la osteocondrosis cervical:

  • En primer lugar, se trata de un estilo de vida sedentario y sedentario, que se observa a menudo en la vida moderna (trabajadores de oficina, conductores y otras profesiones "sedentarias", televisión, largas horas frente a la computadora), falta de actividad física.
  • Posturas tensas y antinaturales durante el trabajo: por ejemplo, frente a una computadora, una persona a menudo se inclina hacia adelante, adoptando una postura tensa.
  • La razón opuesta es que la carga es demasiado alta e inusual para una persona determinada; pero incluso los atletas entrenados, por ejemplo los levantadores de pesas, corren riesgo;
  • Cualquier motivo que altere la postura natural de una persona: zapatos incómodos, especialmente tacones altos, mala posición para dormir, pie plano, reumatismo, escoliosis;
  • Exceso de peso, que a menudo es causado por una mala alimentación.
  • Estrés frecuente, tensión nerviosa severa, exceso de trabajo constante.
  • hipotermia local

¿Por qué es peligrosa la osteocondrosis cervical?

Muchos vasos, arterias y capilares vitales se concentran en la zona del cuello, por lo que cualquier alteración allí puede tener consecuencias desagradables, como falta de oxígeno, hipertensión y distonía vegetativo-vascular.

La osteocondrosis cervical afecta los segmentos de la columna que controlan el funcionamiento de las articulaciones del hombro y el codo, la glándula tiroides, las manos y otros órganos. En la osteocondrosis, si no se trata, existe una alta probabilidad de pinzamiento de los nervios y compresión de los vasos sanguíneos, lo que inevitablemente afecta el funcionamiento de otros órganos.

Diagnóstico

Dado que los síntomas de la osteocondrosis son leves y, a menudo, se superponen con otras patologías, es mejor realizar un examen inicial con un terapeuta u otro especialista: un neurólogo, un ortopedista. Le preguntará sobre el dolor y otros síntomas, comprobará la movilidad del cuello, el estado de la piel, el equilibrio y los reflejos.

Si se realiza un diagnóstico primario de "osteocondrosis cervical", el médico lo derivará a estudios adicionales. El más eficaz de ellos es la resonancia magnética, seguida de la tomografía computarizada. Los estudios de rayos X son mucho menos efectivos que los dos primeros, especialmente en la enfermedad avanzada. El estado de los tejidos blandos se controla mediante ecografía. Si su médico sospecha que hay daño en los vasos sanguíneos, es posible que lo deriven a una exploración vascular dúplex.

Dado que algunos síntomas se superponen con signos de angina y enfermedad coronaria, es posible que deba consultar a un cardiólogo que lo derivará para un ECG y una ecocardiografía.

Características del tratamiento

El suministro insuficiente de sangre al cerebro debido a la osteocondrosis del segmento cervical debe tratarse de forma integral. La base de la terapia son los medicamentos, además se utilizan otros métodos conservadores (fisioterapia, fisioterapia, etc. ). Y en casos avanzados, puede ser necesaria una cirugía.

Los médicos han identificado los principales objetivos de la terapia:

Osteocondrosis y ataques de pánico.

  • Restaurar la funcionalidad del cerebro, mejorar su suministro de sangre, por lo que el órgano está saturado con una gran cantidad de oxígeno y nutrientes.
  • Alivio de la reacción inflamatoria, activación de procesos de regeneración de tejidos dañados.
  • Algunos medicamentos ayudan a normalizar la composición de la sangre, haciéndola más fluida, lo que mejora su calidad y velocidad de movimiento.
  • Expande la luz de los vasos sanguíneos y espesa las áreas dañadas.
  • Estabilizar la presión arterial.
  • Restaurar la estructura normal de la columna, saturar el tejido del cartílago con sustancias útiles y fortalecerlo.

Es importante comprender que la terapia compleja ayudará a eliminar los problemas circulatorios en el cerebro, pero no será posible curar completamente la osteocondrosis. Pero con el tratamiento adecuado es posible ralentizar el desarrollo de la patología durante mucho tiempo.

Con cuidado. Cualquier medicamento para los trastornos circulatorios cerebrales debido a la osteocondrosis cervical puede tomarse solo por razones médicas. De lo contrario, los síntomas de la enfermedad pueden empeorar o complementarse con otros nuevos, por ejemplo, dolores de cabeza medicados. Cuando se abusa de las drogas, la circulación sanguínea en el cerebro se deteriora.

Grupos de medicamentos para mejorar el flujo sanguíneo cerebral.

Los siguientes grupos de medicamentos ayudarán a mejorar la circulación cerebral en la osteocondrosis cervical:

  • Los vasodilatadores aceleran el flujo sanguíneo y el transporte de nutrientes al cerebro al aumentar la luz de los vasos sanguíneos.
  • Medicamentos que previenen la formación de coágulos sanguíneos, así como medicamentos a base de aspirina. Mejoran la permeabilidad de los vasos sanguíneos y evitan que los glóbulos rojos y las plaquetas se adhieran a sus paredes. Como resultado, la sangre se adelgaza y fluye más rápido hacia el cerebro.
  • Diuréticos. Estos medicamentos previenen el estancamiento y la hinchazón. El primer fármaco se utiliza para la acumulación excesiva de líquido en las células cerebrales, el segundo es adecuado para eliminar la hinchazón de cualquier localización.
  • Los osmodiuréticos son los únicos fármacos que no bloquean la formación de orina. Se utiliza para estimular la diuresis en la osteocondrosis cervical.
  • Antioxidantes. Estas pastillas mejoran el estado de las terminaciones nerviosas y reducen los procesos oxidativos nocivos en las células del cuerpo.
  • Antipsicóticos. Estos medicamentos ralentizan la transmisión de los impulsos nerviosos y alivian el dolor durante mucho tiempo. Ayudan a afrontar el estrés, el dolor prolongado y mejoran el estado de los nervios espinales.

Sin embargo, conviene recordar que todos los medicamentos tienen contraindicaciones, por lo que está prohibido tomarlos sin el conocimiento de un médico.

Medicamentos para mejorar la circulación cerebral.

Los médicos han identificado medicamentos que mejoran la circulación sanguínea en los vasos intracraneales para la osteocondrosis del cuello:

  • Broncodilatador que elimina los espasmos y normaliza el flujo sanguíneo. A menudo se utiliza durante la electroforesis, un procedimiento fisioterapéutico durante el cual los fármacos penetran en el cuerpo a través de la piel bajo la influencia de una corriente.
  • Un fármaco a base de teofilina y ácido nicotínico satura la sangre con oxígeno y mejora su calidad. Cuando se usa, la microcirculación se acelera, los vasos sanguíneos se dilatan y la circulación sanguínea se normaliza. El medicamento puede reducir rápidamente la presión arterial.
  • Medicamento que contiene ácido tióctico, que ayuda a expandir la luz de los vasos sanguíneos. Mejora los procesos metabólicos y elimina el espasmo vascular.
  • Medicamento a base de sangre de ganado. Ayuda a normalizar el estado de los vasos intracraneales, enriquece las neuronas con oxígeno y glucosa.
  • El ácido nicotínico ayuda a dilatar los vasos sanguíneos pequeños, reduce la concentración de colesterol malo y restablece el suministro de sangre al cerebro.
  • Medicamentos para dilatar los vasos sanguíneos, hacer que la sangre sea menos viscosa, normalizar la microcirculación y ayudar a eliminar los mareos.

Referencia. En caso de accidente cerebrovascular asociado con osteocondrosis, se utilizan AINE (medicamentos antiinflamatorios no esteroides). Estos medicamentos ayudan a aliviar el dolor que se produce en las últimas etapas de la patología. Sin embargo, está prohibido tomarlos durante mucho tiempo sin el conocimiento de un médico, ya que tienen muchas contraindicaciones.

Como regla general, durante el tratamiento se utilizan varios medicamentos según un régimen específico.

Tratamientos adicionales

El tratamiento combinado se complementa con fisioterapia, que incide en la causa de la enfermedad. Con la ayuda de la terapia con ejercicios, es posible mejorar la circulación sanguínea, los procesos metabólicos y mejorar el trofismo de la columna. Con el ejercicio regular se fortalecen los músculos que rodean las vértebras dañadas, lo que permite aliviarlos ligeramente. Sin embargo, para obtener buenos resultados las clases deben realizarse con regularidad.

En caso de trastornos de la circulación cerebral asociados con la osteocondrosis cervical, está indicada gimnasia especial.

El paciente debe seguir estas reglas de entrenamiento:

  • Comience con movimientos simples a un ritmo lento y de mínima amplitud, aumentando gradualmente el ritmo.
  • Antes de hacer ejercicio, masajee su cuello o tome una ducha tibia para calentar sus músculos.
  • Durante el entrenamiento, esté atento a sus sentimientos. Al principio puede haber algunas molestias, pero al cabo de 3-4 días el cuerpo se adaptará y tu salud mejorará. Si esto no sucede o se produce un dolor agudo, visite a un médico.

El complejo para cada paciente lo elabora un médico, teniendo en cuenta los síntomas, la gravedad de la patología, la edad y el estado de salud general.

Referencia. Se recomienda complementar la terapia con ejercicios en caso de trastornos de la circulación cerebral con caminar o andar en bicicleta, natación, yoga, ejercicios de respiración y ejercicios cardiovasculares (elíptica, bicicleta estática).

Un método de tratamiento auxiliar es la fisioterapia. Para mejorar la circulación cerebral se prescriben electroforesis, magnetoterapia, baños medicinales y acupuntura.

Para que la columna y los vasos sanguíneos funcionen normalmente, el paciente debe comer adecuadamente. La dieta debe complementarse con alimentos ricos en fibra, ácidos grasos, elementos del grupo B, tocoferol y ácido ascórbico. Para hacer esto, necesita comer más verduras, frutas, bayas y hierbas. Además, es útil que los pacientes ingieran pescados grasos de mar, carnes magras, frutos secos, aceites vegetales, etc. Se recomienda beber al menos 2 litros de agua filtrada al día.

En caso de una mala alimentación, la falta de nutrientes se puede compensar con la ayuda de complejos de vitaminas y minerales. Su médico le ayudará a elegir el medicamento adecuado.

La cirugía para la mala circulación en el cerebro debido a la osteocondrosis cervical se realiza solo en casos extremos. Puede surgir la necesidad de una intervención quirúrgica si hay un gran crecimiento óseo que comprime el vaso. Durante el procedimiento, se extrae el osteofito; si por alguna razón no es posible hacerlo, se inserta un stent en el vaso sanguíneo.

Cómo tratar la osteocondrosis cervical

El éxito real y sostenible en el tratamiento de la osteocondrosis cervical sólo se puede lograr con un enfoque integrado que incluya medicamentos, masajes en la zona del cuello, ejercicios terapéuticos y fisioterapia. En casos particularmente avanzados, puede ser necesaria una intervención quirúrgica. Naturalmente, el paciente debe eliminar o minimizar los factores que contribuyen al desarrollo de la enfermedad: moverse más, comer mejor, etc.

Le recomendamos encarecidamente que no recurra a la automedicación, principalmente porque los síntomas de la osteocondrosis pueden significar una enfermedad completamente diferente: los medicamentos que elija no solo no ayudarán en el tratamiento, sino que también pueden causar daño. Incluso durante las exacerbaciones dolorosas, no se apresure a ir a la farmacia a comprar analgésicos; es mejor programar una cita con un médico y, mejor aún, hacerlo con anticipación, ante los primeros síntomas.

Aliviar el dolor agudo

La osteocondrosis, especialmente en las últimas etapas, se acompaña de un dolor intenso, por lo que la primera tarea del médico tratante es aliviar su sufrimiento. Le recetará analgésicos, antiinflamatorios, vitaminas, condroprotectores para restaurar el tejido cartilaginoso, medicamentos para mejorar la circulación sanguínea y reducir los espasmos musculares.

En este artículo, deliberadamente no damos los nombres de medicamentos específicos; es mejor dejar su elección a los médicos, quienes tendrán en cuenta todas las posibles consecuencias y evaluarán las contraindicaciones.

Ejercicios terapéuticos para la osteocondrosis cervical.

El método más sencillo y accesible, incluso en casa, son los ejercicios terapéuticos. Al mismo tiempo, también es bastante eficaz, ya que fortalece los músculos del cuello, restablece la circulación sanguínea en las zonas dañadas y compensa la falta de movimiento en la vida cotidiana. La fisioterapia se puede complementar con natación y gimnasia acuática.

Existen muchos métodos, incluido el uso de simuladores: la mayoría de ellos no requieren equipo especial ni condiciones especiales, pero le recomendamos que se comunique con la oficina de fisioterapia, donde seleccionarán los conjuntos de ejercicios más efectivos para usted y realizarán las clases. bajo la dirección de un especialista experimentado.

Fisioterapia

El uso correcto y constante de métodos fisioterapéuticos mejora la circulación sanguínea en las zonas dañadas, reduce la inflamación y el dolor y ralentiza el proceso de osificación.

Para la osteocondrosis de la columna cervical, se utilizan electroforesis, terapia magnética, terapia con láser, terapia con ondas de choque, baños y duchas terapéuticos, fangoterapia y otros métodos.

Masaje de cuello para la osteocondrosis de la columna cervical.

Para la osteocondrosis, el masaje puede resultar muy eficaz: mejora la circulación sanguínea, reduce la probabilidad de espasmos al reducir el tono muscular, alivia los síntomas del dolor y mejora el bienestar general del paciente.

Pero el masaje y la terapia manual deben usarse con mucho cuidado, ya que un impacto inepto y brusco en las áreas enfermas del cuerpo solo puede causar daño. Le recomendamos encarecidamente que consulte primero a su médico.

Cirugía

En casos especialmente avanzados, no se puede descartar ni siquiera la intervención quirúrgica: estrechamiento de la luz de la columna vertebral, formación de hernias de disco intervertebrales o espondilolistesis.

La decisión sobre la necesidad y el método de la intervención quirúrgica la toma el cirujano, quien también determina las operaciones preparatorias, la duración del postoperatorio y la rehabilitación.

Causas de trastornos circulatorios cerebrales y flujo venoso.

La alteración del flujo venoso con osteocondrosis cervical es una causa común de dolores de cabeza, disminución del rendimiento mental, debilidad constante y somnolencia. El estancamiento de la sangre venosa provoca el derrame de líquido hacia el espacio intercelular. Esto puede causar un aumento de la presión intracraneal. Las estructuras del cerebro están sometidas a una enorme presión y no pueden funcionar normalmente. Entonces los niveles de presión arterial pueden comenzar a aumentar. En general, esta situación es peligrosa porque puede haber amenaza de accidente cerebrovascular hemorrágico. Tiene una tasa de mortalidad muy alta incluso entre pacientes jóvenes.

Prevención de la osteocondrosis cervical.

La osteocondrosis de la columna cervical es una enfermedad cuyo impacto negativo puede minimizarse con una prevención adecuada y oportuna. Hay que pensar en su prevención en la infancia: la mala postura y el pie plano en un niño son motivo para consultar a un médico para un diagnóstico.

La base para la prevención de la osteocondrosis es un estilo de vida correcto: actividad física razonable y ejercicio periódico durante el trabajo sedentario, una dieta saludable y control del peso corporal.

Complicaciones

La falta crónica de oxígeno conduce rápidamente a la interrupción de los procesos en el cuerpo humano. En ausencia de un tratamiento oportuno y adecuado, los síntomas anteriores se intensificarán gradualmente. Dependiendo de qué cerebro se vea más afectado por la deficiencia de las sustancias necesarias, existe la posibilidad de desarrollar una serie de complicaciones.

Consecuencias del accidente cerebrovascular en la osteocondrosis de la columna cervical:

  • enfermedad hipertónica;
  • isquemia cerebral;
  • alteración del ritmo cardíaco;
  • problemas de orientación y coordinación;
  • cambio en la calidad y tipo de respiración;
  • Disminución de la movilidad de las extremidades superiores.

Incluso si las condiciones enumeradas han comenzado a aparecer, esto no es motivo de pánico. En tales casos, también existe la posibilidad de curación y restauración completa de las funciones deterioradas. Lo principal es no retrasar más la visita al médico, sino comenzar rápidamente la terapia.